Congregación Mariana Trinitaria apoya a los migrantes en el extranjero
MADRID, ESPAÑA.- La pandemia de la COVID-19 ha ensanchado la brecha que ya existía entre las economías latinoamericanas y los demás países emergentes en su carrera hacia el crecimiento. La crisis sanitaria se ha cebado con una región donde el PIB, según el Fondo Monetario Internacional, se desplomará un 9,4% este año y el número de personas bajo el umbral de la pobreza pasará de 185 a 231 millones -4 de cada 10 latinoamericanos-, según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD.
Con 6,5 millones de casos diagnosticados y cinco de sus países entre los diez con niveles más altos del mundo, Latinoamérica es ahora el centro de la pandemia. Esto agravará la situación ya de por sí extrema: era y sigue siendo la región más desigual del planeta. ¿Pero cuáles son los motores de sus economías?
Tres son las columnas que sustentan, a vista de pájaro, las economías de LATAM: las materias primas (principalmente productos del campo, energía y metales), los servicios (con turismo a la cabeza) y las remesas (el dinero que envían los emigrantes a sus familias). Ésta última, al contrario que las materias primas y los servicios, no ha dejado de crecer en la última década; erigiéndose, junto al gasto público, como un soporte fundamental -aunque precario- de millones de personas.
Millones de latinoamericanos, especialmente en México y Centroamérica, dependen íntegramente de lo que les envían sus familiares en Norteamérica o España. Y aunque en marzo se temía lo peor, parece que durante los últimos meses el número de envíos se aproxima lentamente a cifras pre-COVID. Pero ¿cuáles son las causas de esta capacidad de resistencia de los migrantes latinos?
Empatía, tipos de cambio y ahorro
Gabriela espera en una fila ante el Western Union en el barrio madrileño del Puente de Vallecas. Acaba de dar a luz y no le sobra el dinero, pero sabe que allá en Venezuela hace más falta todavía. Las dos personas que tiene delante hacen cálculos con el móvil para averiguar cuánto les supondrá el cambio de divisa. Y suspiran aliviados por haber sido prudentes y disponer de un colchón de cuatro dígitos en la cuenta.
Esa suele ser la realidad de un migrante medio en España y EE. UU. La resistencia de las remesas ante las adversidades se debe a tres causas, según los expertos. La primera, la disposición de los migrantes a ponerse en la piel de sus familiares y a enviar más dinero cuando vienen curvas. La segunda, unos tipos de cambio muy favorables de las principales monedas de la región. Y la tercera, el ahorro acumulado en los últimos años.
Según resultados del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), los ingresos por remesas en Latinoamérica y el Caribe superaron los US$93.000 millones en 2019. Los países que recibieron más remesas fueron México, Guatemala y República Dominicana. En Sudamérica se destaca Colombia, que alcanzó una cifra récord de US$6.773 millones.
Como muestran los datos de diversos organismos, México es uno de los países que más remesas reciben en el mundo. El 97% de los mexicanos que se van de su país, migra hacia Estados Unidos, según Cemla. Cuando la economía estadounidense goza de buena salud, los migrantes ahorran, y eso se traduce en un aumento de las remesas.
La relevancia de las remesas en el desarrollo de los países con ingresos bajos y medios es tal que fue incluido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU como una alternativa para reducir la desigualdad entre naciones y dentro de un país. La meta es que para el 2030 el costo de estas transferencias sea menor al 3% del envío total. Además, se busca que éstas impulsen una mayor inclusión financiera en los países en desarrollo.
Mensaje CMT
Ante esta realidad, Congregación Mariana Trinitaria – CMT desarrolla dos actividades paralelas para incentivar el ahorro y apoyar a los migrantes en el extranjero:
– Por un lado, CMT mantiene desde hace años un programa de coinversión para multiplicar las remesas que un grupo de migrantes pacten enviar a México -con la formación de un grupo comunitario- con el objetivo de hacer mejoras en su lugar de origen. Gracias a la suma de voluntades del migrante, CMT y una institución extra; se destinan tres aportaciones a un mismo beneficio: el bien común de su comunidad.
Por otro lado, acabamos de firmar un convenio de colaboración con el movimiento binacional Fuerza Migrante para sumar acciones y voluntades en beneficio de los migrantes mexicanos. El objetivo principal es acelerar iniciativas de infraestructura y equipamiento en zonas expulsoras de migrantes; impulsar proyectos de salud e investigación, medio ambiente y turismo; vivienda y patrimonio; ahorro y acceso a sistemas financieros y de seguridad social; incluyendo el aprovechamiento de remesas, acceso a seguros de vidas y gastos médicos.
#SomosCMT