Entregan restauración de La Virgen del Refugio en Zacatecas
La pintura de caballete de La Virgen del Refugio del Convento franciscano de Nuestra Señora de Guadalupe, Zacatecas, fue restaurada y devuelta a su comunidad religiosa por la Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en el umbral de la celebración de la Semana Santa de este 2024.
Las características de esta pieza datada en el siglo XVIII, la vuelven un elemento único, de alto valor cultural y gran belleza estética, toda vez que existen muy pocas imágenes parecidas y todas se encuentran en colecciones de museos.
Su feligresía le profesa una amplia devoción, especialmente en la Semana Santa, así como un cuidado constante que le brindan los religiosos franciscanos, cuyo convento comparte espacio con el Museo de Guadalupe, uno de los más importantes del norte de México por su estupenda pinacoteca.
La imagen se encuentra en el altar izquierdo del crucero del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, sitio que conserva desde 1821.
Se trata de un lienzo adosado a un marco veneciano, el cual forma una especie de caja semioval. En su parte inferior presenta un pedestal a partir del cual se advierte que, además de ser una imagen de culto, tenía también una naturaleza peregrina.
El citado marco está recubierto, al frente, por molduras de bronce rojo dorado con latón, siguiendo técnicas de repujado y troquelado. Los especialistas del Instituto encargados de su atención observaron que, en su cara posterior, fue reforzado mediante telas encoladas, ya que la forma de la madera no es natural y presenta una serie de ensamblajes complejos.
Asimismo, en el espacio que existe entre el cristal y el lienzo hay una serie de flores manufacturadas en cera, realizadas con la técnica de las monjas carmelitas, quienes las utilizaban para realizar coronas que empleaban en diversos rituales.
El proceso de conservación y restauración de esta pieza fue ejecutado por expertos del Área de Conservación y Restauración del Centro INAH Zacatecas; previo a su intervención, fue objeto de minuciosos estudios como radiografías, reflectografía infrarroja y análisis de fluorescencia de luz ultravioleta.
Principalmente se analizó su técnica de manufactura, cuyo abordaje representó un reto pues requirió la estabilización de todos los elementos metálicos del marco.
Al reverso de las molduras del bien patrimonial, se identificaron procesos de corrosión y oxidación en los metales, por lo que hubo que realizar limpieza mecánica y físico-química; en lo que respecta a los elementos de madera del marco, también atravesaron por una limpieza similar y, posteriormente, se trabajó el reforzamiento de los ensambles que lo componen.
Finalmente, a partir de los vestigios de la técnica original que presentaba el marco de madera, se repusieron las telas encoladas para reforzar el marco y unir los ensambles de la parte trasera, que sostiene toda la estructura.
Desafortunadamente no fue posible localizar una firma que pudiera proporcionar mayor información sobre la autoría de la obra histórica.