La importancia del ejercicio ético de la abogacía
El ejercicio de la abogacía, requiere un alto nivel de conciencia social, pues en nuestras manos se encuentran los bienes más importantes de los individuos, ya que, cunado una persona acude a solicitar los servicios profesionales de las y los abogados, lo realiza por que necesita resolver algún problema en el que se encuentra involucrada su libertad, su patrimonio, su salud, sus derechos de familiar o cualquiera de los derechos humanos que se encuentra íntimamente relacionados con su dignidad.
Cuando se es Servidor Público, la responsabilidad de llevar a cabo el ejercicio ético de la abogacía es mucho mayor, pues nuestras decisiones afectan de manera directa a todo un colectivo de personas a las que se representa, o en su caso, a quienes se les debe prestar el servicio público voluntariamente admitido, en términos de lo dispuesto por el artículo 128 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
El ejercicio profesional de la abogacía es tan relevante, que incluso los artículos 222 y 223 del Código Penal para el Estado Libre y Soberano de Oaxaca, señalan sanciones penales contra las y los abogados que ejerzan de manera inadecuada su función, lo cual incluye la suspensión del ejercicio profesional.
Ante este panorama, resulta indispensable contar con un espacio de preparación y certificación ética constante para quienes ejercemos la interpretación y aplicación del Derecho, es por ello que en el año 2018, se aperturó el Capítulo Oaxaca de la Barra Mexicana, Colegio de Abogados A.C. y voy a aprovechar este espacio de opinión para que la sociedad nos conozca:
La Barra Mexicana, Colegio de Abogados A.C. es una Asociación Civil legalmente constituida conforme a las leyes mexicanas, fundada el 12 de Octubre del año 1922, es decir, cuenta con más de 100 años, con la pertenencia de juristas mexicanos de gran renombre, cuyo objetivo principal es, como se establece en sus propios estatutos: “velar por el buen nombre de la profesión, defender los intereses objetivos del grupo, prestar a las y los asociados el apoyo moral de que hubiera menester y fomentar el espíritu de la justicia entre los particulares entre sí, y en el de los funcionarios encargarlos de administrarla, procurando que la abogacía nunca se aparte de los estrictos preceptos de la moralidad, y se ajuste a la doctrina de la ciencia jurídica.”
En ese sentido, el pasado 1 de marzo de 2023, entró en funciones el nuevo comité directivo, el cual tengo el gran honor de presidir, con un plan de trabajo enfocado al fortalecimiento del ejercicio ético de la profesión, fomentar el trabajo pro bono, realización de diversas actividades de interés jurídico con la participación de operadores del derecho de todos los niveles y disciplinas y la inclusión de jóvenes en formación para fomentar en ellos los altos ideales y valores de la ética, la moral y la justicia.
El contar con profesionistas del derecho preparados, con una amplia formación de valores y un estricto código de ética, ayudará a formar una sociedad más justa, igualitaria y unida, por lo que, contar con éste espacio de crecimiento es en aras del bien común.
Es cuanto.
Jaime Alejandro Velázquez Martínez.
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