Fraternidad Universal
El sábado pasado, tuve la oportunidad de participar como ponente en el foro “desde el más allá”, hablando acerca de los diferentes ritos que existen en la Masonería, y derivado del interés que pude percibir, me permitiré ampliar la experiencia a través de esta columna, que recibe su nombre precisamente de los misterios de dicha institución.
Como incluso lo he mencionado con anterioridad, la Masonería es la institución del desarrollo de la filosofía moral, que tiene como finalidad construir templos vivos a la virtud y cavar pozos sin fondo a los vicios, su inspiración es divina, pero se encuentra administrada por seres humanos que tienen en común la voluntad de ser mejores personas, lo que implica desarrollar sus diferentes niveles de conciencia, a saber: la conciencia moral, que es la que nos permite discernir el bien del mal; conciencia social, que nos permite percibir como la interacción con nuestros semejantes afecta nuestro propio desarrollo, y la conciencia espiritual y divina, y por consecuencia lógica y natural, al desarrollar la conciencia social, estas personas, los iniciados, constantemente practican y fortalecen sus capacidades físicas, psicológicas, sensibles, intelectuales y esotéricas, adquieren el imperium para intervenir directamente en el desarrollo de la civilización a la que pertenecen como género humano.
En ese sentido, nos encontramos dotados de diversas facultades para nuestro desarrollo, las primeras, y las más elementales, son nuestros 5 sentidos básicos: vista, gusto, olfato, tacto y oído, que nos permiten interactuar con nuestro universo más inmediato y tangible, percibir información, procesarla y posteriormente expresarla; sin embargo, existen otras facultades inherentes a nuestra naturaleza que nos permiten interactuar con el universo de las abstracciones, es decir, aquello que existe, de manera intangible y que en su momento le damos forma para que tenga un significado para nosotros, y hacemos objetivo algo que carece de materia; estas facultades son: el pensamiento como facultad humana de formar ideas y representaciones de la realidad, el instinto, que es el resorte conservador de la existencia animal, la inteligencia, que es la facultad de recibir las impresiones de los sentidos, comprender y comprobar los actos que satisfagan a nuestras necesidades y la razón: Que es la facultad de elevarse de lo concreto a lo abstracto, comprender la naturaleza de las cosas, encontrar la verdad que destruye los errores de la intuición y los sofismas de la inteligencia.
La Masonería se vale de símbolos, alegorías y misterios, precisamente para transmitir esas verdades, esas enseñanzas tan sublimes que solamente pueden otorgarse de manera vivencial.
Dentro de los misterios, que no son mas que la representación de algún acto que estimule el psique del iniciado, para grabar en su memoria la enseñanza, se encuentra el rito.
Es así como explicamos, que una institución universal, tenga diversos caminos para encontrar esa verdad oculta, simple y sencillamente porque, el ser humano, al contar con conciencia social, ha desarrollado la conciencia política, con capacidades de crear estructuras complicadas de convivencia y someternos a ellas, y según nuestra cultura, identificamos más fácilmente algunos elementos que otros.
La Masonería, por naturaleza es universal, su inspiración divina hace que sea accesible a todos los seres humanos por igual, y se funda sobre los principios de la ley natural, en la que se fomenta en los miembros de la institución los principios fundamentales de la Igualdad, la Libertad y la Fraternidad,sin embargo, al ser administrada por seres humanos, sería peligroso no contar con una guía para normar su conducta, aunado a que el hombre tiene la facultad de dictar normas para autorregularse y vivir armónicamente en sociedad; cuenta con normas de conducta reconocidas y respetadas por todo aquel que se permita denominar Masón, entonces, entendemos que la Masonería como la conocemos actualmente, tiene una naturaleza en común, y el rito, únicamente determinará la forma en la que se transmiten los secretos de la orden.
La Masonería, se conforma de tres grados, Aprendiz, Compañero y Maestro, su estructura es vertical, pues existen jerarquías que deben ser respetadas y solamente se puede avanzar a través del trabajo, el estudio y el desarrollo gradual de nuestras aptitudes.
Existen diferentes ritos masónicos, cada uno con su propio sistema de grados, simbologías, alegorías, misterios, pero, no se encuentran conflictuados entre sí, pues todo ese sistema, solamente perfecciona a la Masonería Simbólica, entre los cuales destacan: el Escocés Antiguo y Aceptado, el cual es el mas conocido en México, se caracteriza por no tener ninguna restricción religiosa y se divide en: las logias de perfeccionamiento: grados 4-14 en los que fortaleces la conciencia social; capítulos rosacruz: 15-18 en donde desarrollas la conciencia espiritual y divina; el Concilio de Caballeros Kadosh en los que se te revelan los grandes misterios históricos de la FrancMasonería, y el Concistorio de Maestros del Real Secreto, que son los grados 31 al 33º, cuya esencia es más administrativa y de supervisión del buen funcionamiento de la orden; el rito York, que se conforma de una confederación de cuerpos masónicos autónomos y cooperativos, dividida en: Capítulos, concilios y comandancias; su desarrollo teológico es mucho mas restrictivo, pues el pináculo del rito York, que es la Comandancia Templaría, limita su membresía a francmasones que profesen la fe cristiana; mismos, que reitero, son diferentes caminos para el desarrollo de sus adeptos y la evolución constante del género humano, pues incluso, los diversos ritos masónicos se unen para ser promotores del pensamiento liberal y progresista en la sociedad.
Es cuanto.
Jaime Alejandro Velázquez Martínez.
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