La primera dama estadunidense Jill Biden usó sus destrezas de educadora para modificar los recorridos por la Casa Blanca, develando el lunes una nueva versión que incluirá más detalles sobre la historia de la mansión presidencial estadunidense y los eventos históricos que ocurrieron en sus famosos salones.

Los recorridos por la Casa Blanca ahora incluirán la Sala de Recepciones Diplomáticas, que antes no se podía visitar. La sala, en el primer piso de la mansión, es donde el presidente Franklin D. Roosevelt ofrecía sus “charlas en la chimenea”. Los visitantes ahora podrán escuchar partes de esas charlas.

Podrán también conocer otras salas en la planta baja que antes estaban vedadas: la biblioteca; la Sala de Porcelana, donde está la colección de platos y vasos de porcelana de la Casa Blanca; y la Sala Vermeil, que alberga una colección de vasijas.

También podrán visitar la Sala Este y el Comedor de Cenas de Estado, en el piso superior.

Los visitantes además podrán interactuar con despliegues digitales que reemplazarán los letreros físicos a la entrada de las salas y que ofrecerán una experiencia multisensorial.

“La educación es mi trabajo de toda la vida y sé que hay tres formas de aprender: visual, auditiva y táctil”, dijo Jill Biden, quien fue maestra durante 40 años, el domingo en la noche cuando ella y el presidente Joe Biden fueron anfitriones de una cena para celebrar la versión actualizada de los tours.

Tras hacer ella misma el recorrido de la Casa Blanca, la primera dama decidió que quería expandirlo para añadir más contenidos educativos e históricos, según allegados. Habían pasado décadas desde que el paseo había sido actualizado.

“El tour de la Casa Blanca ahora permitirá a los visitantes tocar, escuchar y ver la historia de cerca”, dijo la primera dama el domingo.

Unas 10 mil personas hacen el recorrido de la mansión presidencial cada semana.

Cuando los visitantes ingresen por el Ala Este, Jill Biden aparecerá en video dándoles la bienvenida, mientras que el presidente Biden aparecerá en video en la Sala Este para contarles un poco de la historia que tuvo lugar allí. El próximo presidente (o presidenta), que asumirá el cargo en enero, junto con su pareja podrá grabar sus propios mensajes de bienvenida ya que los cambios están hechos de tal manera que pueden ser adaptados de una administración a la otra.

Las exhibiciones de fotos que flanquean los pasillos serán ahora digitales, de tal manera que será más fácil cambiarlas, mientras que un modelo tridimensional de las 7.2 hectáreas (18 acres) de terrenos que tiene la Casa Blanca explica cómo fue construida la mansión presidencial y cómo fue expandida a lo largo de más de 200 años.

El despacho de la primera dama trabajó en el proyecto los últimos dos años con el Servicio de Parques Nacionales, la Oficina del Curador de la Casa Blanca, la Asociación Histórica Nacional de la Casa Blanca, las bibliotecas presidenciales y el History Channel.