Cerrando la brecha en salud materna: guías de alimentación saludable y sostenible
Es relevante recordar que el acceso a la alimentación es un derecho; no obstante, aún persiste la necesidad de garantizar la seguridad alimentaria y la alimentación saludable y sostenible en diversos grupos de población, entre los que destaca el de las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
El embarazo y la lactancia son periodos cruciales en los cuales la mala nutrición de la mujer puede influir sobre el riesgo de enfermedad a lo largo de la vida, tanto en ellas como en sus hijos o hijas. Dichos periodos implican en las mujeres cambios fisiológicos y metabólicos que aumentan sus necesidades de nutrimentos para satisfacer las nuevas demandas fisiológicas; estas últimas están orientadas a apoyar el crecimiento y el desarrollo óptimos del bebé, mantener su salud en general y preparar su cuerpo para el parto y la lactancia materna.
Sin embargo, en México, una proporción significativa de mujeres en edad reproductiva (de 14 a 50 años) no consume cantidades adecuadas de vitaminas y minerales. Una mujer embarazada que no lleva una alimentación saludable puede tener mayor riesgo de desarrollar diabetes gestacional, hipertensión durante el embarazo (preeclampsia) y complicaciones durante el parto, entre otros problemas de salud. Durante la lactancia, el estado de nutrición de la mujer impacta en la composición de la leche humana, la cual está determinada por la alimentación actual, por las reservas de nutrimentos en el cuerpo y por las alteraciones en la utilización de nutrientes influenciadas por el entorno hormonal. Así, la alimentación de las mujeres durante estas etapas de la vida influye tanto en su nutrición y salud como en la de su descendencia, a corto y largo plazo.
Dado lo anterior, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado la nutrición materna como un tema prioritario de salud pública a nivel global, debido a su relevancia para la preservación de la salud de las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia; asimismo, ha delineado pautas para la atención prenatal. Sin embargo, se carece de directrices integrales que detallen las necesidades nutricionales de las mujeres a lo largo de su etapa reproductiva, desde la preconcepción hasta el embarazo y la lactancia. Por otra parte, una revisión sistemática mostró que la orientación nutricional (impartida por personal formado en el área de nutrición) fue eficaz en el cuidado prenatal para mejorar los resultados maternos e infantiles.
En México no se contaba con guías de alimentación para mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, aun cuando es esencial asegurar que, durante estas etapas fisiológicas, la alimentación proporcione todos los nutrimentos necesarios para la mujer. Cabe señalar, además, que es imperativo mejorar la alimentación de la población para contribuir a reducir las desigualdades en salud entre nuestra población.
Dado lo anterior, y a fin de fortalecer las políticas de alimentación y de contribuir con lineamientos para mejorar la nutrición materna en el país, se desarrollaron las Guías de Alimentación Saludables y Sostenibles Mexicanas (GASS) para mujeres (M) mexicanas (de 14 a 50 años) embarazadas (E) y en periodo de lactancia (PL). Dichas guías están basadas en el perfil actual de nutrición de este grupo de población, el contexto de doble carga de mala nutrición (por presencia de sobrepeso y obesidad, así como de deficiencias de vitaminas y minerales), los cambios fisiológicos que enfrentan esas mujeres y el fomento de una dieta saludable y sostenible.
Las GASS para MEyPL consideran 10 recomendaciones dietéticas prioritarias, adaptadas con porciones y frecuencias para el consumo de alimentos. Estas guías fomentan la ingesta de verduras y frutas, leguminosas (frijoles, lentejas o habas, etc.), cereales integrales o de granos enteros y agua natural; promueven la actividad física, al igual que comer en familia y respetar los horarios de comidas; recomiendan moderar el consumo de carnes rojas y de productos de origen animal, así como evitar el consumo de productos ultraprocesados; prohíben el consumo de bebidas alcohólicas en estos periodos de vida, y fomentan la preparación para brindar lactancia materna.
Asimismo, las Guías otorgan información sobre el total de porciones al día recomendadas por grupo de alimento, para ocho perfiles de energía identificados, considerando las calorías adicionales por rango de semanas de embarazo o por semestre de lactancia; brindan también recomendaciones según 32 perfiles específicos de referencia para embarazadas y 32 para mujeres lactantes, definidos con base en la edad, el estado de nutrición (de acuerdo con su índice de masa corporal pregestacional, en caso de embarazo, o bien, el actual para las mujeres lactantes), el nivel de actividad física, y la semana de gestación o semestre de lactancia. Para lo anterior se toman como referencia las recomendaciones de energía elaboradas por la Academia Nacional de Ciencias, Ingeniería y Medicina 2023, y las de nutrimentos, del Instituto de Medicina de Estados Unidos.
Las GASS-2024 para mujeres EyPL proporcionan por primera vez recomendaciones dietéticas orientadas a fomentar una alimentación saludable y sostenible para esa población en México. La finalidad es contribuir a la prevención y el control de la mala nutrición en las madres y en su descendencia, y así coadyuvar a reducir las brechas que en salud aún pueda haber en nuestro país.
Instituto Nacional de Salud Pública
