¿Puede la enfermería ganar un Premio Nobel?
En 2006, Sandy Summers, una enfermera de la Universidad Johns Hopkins fundó La verdad sobre la enfermería, una organización dedicada a cambiar los estereotipos de la profesión, y en conjunto con Kristine Gebbie, famosa por su trabajo en la escuela de enfermería de Columbia se hicieron una pregunta ¿Puede la enfermería ganar un Premio Nobel?
Ayer, acompañados por el Dr. David Kershenobich, Secretario de Salud, celebramos el día del personal de enfermería del IMSS y entregamos el Premio a la Calidad de la Atención. Y ahí, frente a 1,850 enfermeras y enfermeros, retomé esa pregunta. Y al igual que Sandy y Kristine yo creo que sí, que los méritos y logros de la enfermería requieren reconocimiento internacional. Que la enfermería también merece tener un Premio Nobel.
¿Por qué? Porque la enfermería también ha cambiado el mundo y ha generado aportes en investigación y práctica en salud. Aquí algunos ejemplos:
Fue una enfermera, Hildegard Peplau, quien en 1952 desarrolló la Teoría de las Relaciones Interpersonales y estableció un marco para la relación enfermero-paciente como un componente esencial del cuidado.
Fue una enfermera, Martha Rogers la que propuso la Teoría de los Seres Humanos Unitarios que introdujo conceptos innovadores como la interacción de pacientes con su entorno.
Fue una enfermera, Jean Watson quien en 1979 desarrolló la Teoría del Cuidado Humano que aporta un marco teórico para la investigación del cuidado centrado en el paciente.
Incluso en la literatura: Mary Borden escribió su experiencia en hospitales de la Segunda Guerra Mundial; De la misma manera que mandas la ropa a la lavandería y la remendas cuando vuelve, mandamos a los hombres a las trincheras y los remendamos cuando regresan.
El pasado 13 de diciembre, en la 115 Asamblea General del IMSS, en Palacio Nacional, la Dra. Claudia Sheinbaum lo dijo: En el IMSS, el personal de enfermería trabaja incansablemente por construir un sistema de salud accesible y gratuito para todas y todos los mexicanos. Les agradezco a todas y a todos, pero en especial a las mujeres porque ellas son más y porque sabemos que a veces les toca la doble jornada, quienes además de atender a todos los derechohabientes en clínicas y hospitales, realizan el trabajo en sus hogares.
Quizá no hayan ganado el Nobel, pero sí el reconocimiento de la primera Presidenta de México, la Presidenta con A.
Por eso la agenda de enfermería del 2o Piso de la 4a Transformación continua. Fortaleceremos lo alcanzado de 2019 a 2024:
1. Tuvimos un incremento del 11% en el personal de enfermería que trabaja en el IMSS
2. Reconocimos a 42,502 trabajadores que acreditaron contar con Título de Licenciatura en Enfermería, y se les otorgó una compensación correspondiente a un mes de sueldo
3. Tenemos a enfermeras en puestos de mando
Y como lo dijo la Jefa Fabiana: Las enfermeras en el IMSS cada día realizan más de 52 mil chequeos prevenIMSS, más de 34 mil procedimientos de diálisis peritoneal, más de 42 mil atenciones integrales pero lo que nadie cuenta son los abrazos o las palabras de apoyo que dan a los pacientes o a sus familias.
Tiene razón: Por eso las enfermeras y enfermeros del mundo, de México y del IMSS son conocidos como los portadores de la luz.
Eduardo Galeano, en El libro de los Abrazos (1989) cuenta del hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, que pudo subir al alto cielo y a su vuelta contó que desde allá arriba, la vida humana se ve como un mar de fueguitos. Eso es la enfermería en el IMSS, un mar de fueguitos en donde ninguno es igual al otro y ninguna es igual a la otra, pero todas y todos comparten el mismo espíritu. Un mar de vidas, un océano de propósitos, sueños y anhelos por cumplir. Un faro que alumbra el destino y el porvenir del Seguro Social.
Opinión –Zoé Robledo
Agencia: MILENIO